Francisco Sánchez – Profesor
A lo largo de los años, la amistad ha demostrado ser un pilar fundamental en la vida de las personas, brindando apoyo, compañía y un sentido de pertenencia. El reencuentro de antiguos alumnos después de 30 años es un testimonio conmovedor de cómo los lazos de amistad perduran a través del tiempo, trascendiendo las barreras de la distancia y algún que otro resquemor.
Corría el año 2017 y en los Salesianos de Villena, se celebró una reunión, bueno más bien un reencuentro, de antiguos alumnos que allá por el año 1993 nos despedimos de la EGB. Por este motivo se organizó un fin de semana variado de actividades y cada uno de nosotros volvimos a experimentar sensaciones casi olvidadas.
Este reencuentro nos ofreció la oportunidad de reflexionar sobre el crecimiento personal y profesional de cada uno de nosotros. Fue un momento para celebrar los logros alcanzados, recordar los desafíos superados juntos y sobre todo para reír y llorar de alegría.
Muchos de nosotros recordamos anécdotas imborrables con don Jesús, en el viaje de fin de curso a Galicia. O con don Manuel y sus clases de inglés. De igual manera, hicimos lo mismo con Don José Antonio y su ronda de preguntas en Lenguaje Castellano. En fin, relatos inolvidables.
La experiencia de encontrarnos después de tanto tiempo generó una mezcla de emociones: alegría, nostalgia y gratitud por haber compartido momentos inolvidables. Además, nos sirvió como recordatorio de la importancia de cultivar y mantener las relaciones interpersonales a lo largo de la vida.
En estos reencuentros, todo fluye de manera sincera y con naturalidad, recordando a cada uno la importancia de la conexión humana en un mundo que a menudo parece estar dominado por lo material y lo superficial. De ahí que la celebración de esta reunión fue la chispa que avivó las ganas de escribir estas líneas que suscribo hoy mismo.
Por todo ello, ser un ex-alumno salesiano es para toda la vida. Aunque el tiempo pueda cambiar muchas cosas, el vínculo de la verdadera amistad perdura, enriqueciendo nuestras vidas con su eterna relevancia.
